En un esfuerzo conjunto para mejorar la calidad de vida de personas con patologías psiquiátricas severas, docentes y estudiantes de la Facultad de Arquitectura y Diseño (FAD) de la Universidad Católica de Santa Fe (UCSF) están llevando adelante un proyecto de extensión en colaboración con la Fundación Gabriel Carrón.
Esta iniciativa busca no solo brindar respuestas edilicias a las necesidades de la fundación, sino también contribuir desde la arquitectura a la reintegración social de una población históricamente invisibilizada.
Cuando la enseñanza transforma realidades
El arquitecto Manuel Mina, profesor de la FAD y voluntario en la Fundación Gabriel Carrón, resalta cómo vincular la responsabilidad social universitaria con la formación académica enriquece tanto a estudiantes como a la comunidad. “Este proyecto nos permite abordar problemas reales y formar a los estudiantes con los pies puestos sobre la tierra, respondiendo a las necesidades del entorno social”, afirma Mina.
Desde hace dos años, lidera proyectos de extensión que incluyen el diseño y la refuncionalización de espacios destinados a un hogar y centro de día, Casa Gabriel Carrón, para los beneficiarios de la fundación. Además, la colaboración ha crecido con la integración de otras facultades, como Ciencias Económicas, para gestionar fondos y garantizar la sostenibilidad del proyecto.
Un refugio en medio del abandono
En cinco años, la Fundación Gabriel Carrón. se ha convertido en un faro de esperanza para personas con esquizofrenia, trastornos esquizoafectivos y otras psicosis graves, especialmente aquellas en situación de calle o conflicto con la ley. Su director, Pablo Ordano, lidera un enfoque integral que incluye alojamiento, apoyo emocional, gestión de documentación, tratamientos médicos y reconstrucción de vínculos familiares.
“Trabajamos con quienes han sido olvidados por un sistema que no ofrece dispositivos adecuados para su tratamiento y reinserción social. Nuestro aporte puede parecer pequeño, pero transforma sus vidas profundamente”, explica Ordano. Con el objetivo de amplificar su impacto, la fundación planea adoptar el modelo de residencias terapéuticas de Brasil, reconocido por integrar apoyo gubernamental y comunitario.
Extensión universitaria con impacto tangible
La colaboración entre la Fundación Gabriel Carrón y la FAD no solo mejora la calidad de vida de las personas asistidas, sino que también transforma la formación de los estudiantes.
Abigail Centurión, Rocío Sarrichio y Augusto Bonomi, estudiantes de quinto año, lideraron el diseño y ejecución de las primeras etapas del centro de día, enfrentando problemas complejos con soluciones concretas. “Este tipo de extensión es virtuoso porque todos ganamos: los estudiantes desarrollan su creatividad y, a la vez, crecen profesional y humanamente”, señala Mina.
El proyecto busca involucrar a más facultades y actores sociales para abordar desafíos como la salud mental, demostrando que la colaboración entre universidad y sociedad puede marcar una diferencia real en la comunidad.
Para apoyar este trabajo y ser parte de la iniciativa, contactate a través del formulario en línea disponible en su sitio web oficial, enviá un correo a info@fundaciongabrielcarron.org o comunicate al +54 343 4062775. Para realizar una donación, ingresar aquí: https://fundaciongabrielcarron.org/donaciones. Tu aporte puede marcar la diferencia.